Cuando piensas en salud cardiovascular, probablemente te vienen a la cabeza palabras como colesterol, hipertensión o ejercicio. Pero, ¿alguna vez has pensado en las encías?
Pues deberías.
Cada vez más estudios confirman algo que los dentistas —los buenos— ya sabemos: lo que pasa en la boca no se queda en la boca. Una infección crónica en las encías puede ser el principio de un problema serio en las arterias. Y aquí, amigo clínico, tu papel es mucho más importante de lo que imaginas.
Por eso, contar con los equipos adecuados para detectar, prevenir y tratar a tiempo no es opcional. Y si quieres tener acceso a la mejor tecnología sin bloquear tu presupuesto, ya sabes: Rentilea es tu mejor compañero de batalla.
¿Qué une a la periodontitis con un infarto?
La respuesta es una palabra: inflamación.
La enfermedad periodontal es una inflamación crónica causada por bacterias que colonizan la línea de las encías. Cuando no la controlas, esas bacterias —o su efecto inflamatorio— viajan por el torrente sanguíneo. ¿Destino? Las arterias. Allí favorecen la formación de placas, endurecen los vasos y aumentan el riesgo de eventos cardiovasculares como infartos o ictus.
Y no, no es una exageración. La periodontitis está considerada un factor de riesgo independiente para enfermedades del corazón, al mismo nivel que el tabaquismo o la hipertensión.

Síntomas bucales que son más importantes de lo que parecen
- Encías rojas, inflamadas o sangrantes
- Mal aliento que no se va
- Movilidad dental
- Dolor al masticar
Estos signos no solo alertan de un problema dental: podrían ser la punta del iceberg de un problema sistémico mucho mayor.
La prevención empieza en tu sillón (y con el equipo adecuado)
Prevenir problemas cardiovasculares desde la consulta dental es posible. Pero no solo basta con saberlo: hace falta poder actuar rápido y con precisión.
Y para eso necesitas:
- Diagnósticos precoces (que requieren, sí, tecnología adecuada: sondas periodontales electrónicas, radiografía digital, exploradores de biofilm).
- Limpiezas profundas bien hechas (con ultrasonidos de última generación, sistemas de irrigación que reduzcan la carga bacteriana…).
- Protocolos de control de placa realmente efectivos.
¿No tienes todo esto?
No pasa nada. Rentilea te permite alquilar los equipos que necesitas, solo cuando los necesitas. Así puedes tratar de forma impecable a tus pacientes, ofrecerles protocolos de alto nivel… y seguir manejando tu consulta de forma rentable y flexible.
¿Y si la enfermedad ya ha avanzado?
Si detectas periodontitis moderada o severa, el tratamiento debe ser inmediato y estratégico:
- Curetajes y alisado radicular para eliminar el biofilm subgingival.
- Cirugías periodontales cuando las bolsas son profundas y la regeneración es posible.
- Terapias antimicrobianas específicas para controlar infecciones locales.
- Seguimiento estrecho para evitar recaídas (y complicaciones mayores).
Todo esto es más fácil cuando dispones de instrumental de precisión y maquinaria actualizada. Otra vez, Rentilea como tu socio silencioso.
Rompiendo mitos
No, las enfermedades de encías no son un problema menor.
No, los problemas dentales no se quedan limitados a la boca.
Sí, una boca sana protege el corazón. Y sí, una buena infraestructura clínica ayuda a salvar mucho más que sonrisas.
En resumidas cuentas
- Mantener la salud bucal de tus pacientes puede ser la diferencia entre un corazón sano y uno en riesgo.
- Detectar y tratar la enfermedad periodontal a tiempo es parte esencial de tu compromiso como odontólogo.
- Trabajar con herramientas modernas, sin hipotecar tu consulta, es posible gracias a Rentilea.
Cuidar una sonrisa es cuidar una vida.
Y con Rentilea, hacerlo está más al alcance que nunca.